La harina de rosa mosqueta: un tesoro andino de Lago Puelo.

En el corazón de la Patagonia andina, Lago Puelo se consolida no solo como un paraíso natural, sino también como un epicentro de innovación gastronómica y productiva. Un ejemplo destacado es el auge de la harina de rosa mosqueta, un producto que rescata las propiedades de este fruto silvestre para ofrecer un superalimento con un sabor y valor nutricional únicos. 
Un proceso artesanal y sostenible
La rosa mosqueta (Rosa eglanteria) es una especie que abunda en la región. Tradicionalmente conocida por su aceite y mermeladas, ahora sus frutos secos y molidos dan lugar a una harina fina y versátil. El proceso de elaboración es laborioso: los frutos son recolectados a mano, luego secados cuidadosamente y finalmente molidos en molinos especiales que permiten conservar todas sus propiedades. Este método, a menudo artesanal y de pequeña escala, asegura la calidad y frescura del producto final.
La producción de esta harina representa un modelo de economía circular y sostenible. Se aprovecha un recurso natural que crece de manera silvestre, sin necesidad de pesticidas ni fertilizantes. Además, impulsa a los productores locales y agrega valor a un recurso que, de otra manera, podría ser subutilizado.
Propiedades nutricionales y usos en la cocina
La harina de rosa mosqueta es una verdadera joya nutricional. Es notablemente rica en vitamina C, superando a cítricos como la naranja. También contiene antioxidantes, como los flavonoides y polifenoles, que contribuyen a la protección celular. Además, es una excelente fuente de fibra dietética, lo que favorece la salud digestiva.
En la cocina, su sabor ligeramente ácido y frutal la hace ideal para diversas preparaciones. Se puede utilizar para enriquecer la harina de trigo en panes, galletas y tortas, aportando un toque especial y saludable. También es perfecta para espolvorear sobre yogures, granolas o batidos, convirtiendo una simple merienda en un cóctel de vitaminas y antioxidantes.
Impulso a la marca local
La harina de rosa mosqueta de Lago Puelo no es solo un producto, sino un reflejo de la identidad de la región. Productores y emprendedores están trabajando para consolidar una marca local que distinga a estos productos por su origen, calidad y el compromiso con la producción sostenible. Este esfuerzo busca posicionar a la harina de rosa mosqueta como un embajador de la rica biodiversidad patagónica y de la innovación que florece en la Cordillera.
La próxima vez que visite la zona, no dude en buscar este producto: la harina de rosa mosqueta de Lago Puelo, un sabor a la Patagonia que cuida de su salud y apoya a la economía local.

Redacción Aljaba Comunicación